Hace una década, pocos habrían predicho que los juegos móviles se convertirían en una fuerza dominante en el ciberdeporte. Títulos como PUBG Mobile, Free Fire y Clash Royale han demostrado que no es necesario tener una PC potente para competir a nivel profesional.
La accesibilidad de los dispositivos móviles ha sido un factor clave en este auge. Con millones de personas utilizando smartphones, los desarrolladores han diseñado juegos optimizados para estos dispositivos, ofreciendo una experiencia fluida y competitiva.
Los torneos de juegos móviles ahora llenan estadios y atraen a una audiencia global a través de plataformas como YouTube y Twitch. Esto demuestra que el ciberdeporte está evolucionando para adaptarse a las nuevas tecnologías, permitiendo que más personas participen y disfruten de este emocionante mundo
